Buenas razones para ser feliz caminando al trabajo

     El homo sapiens dejó paso al homo trailer que va a todas partes en vehículo motorizado. En las ciudades, ni camina ni quiere caminar, y además mira con suficiencia al peatón. Una cosa es utilizar el coche para grandes distancias y otra el abuso que hemos hecho de él.

 El otro día la tentación de bajar en ascensor hasta el garaje me hizo tomar el coche para desplazarme a varios cientos de metros de mi casa. Absurdo.

No hace mucho iba en coche a trabajar a pocas manzanas de mi hogar y confieso que me llevaba mas tiempo el despegue (sacar el coche) y el aterrizaje (aterrizar) y el vuelo ( con atascos) que si hubiese ido paseando.

También recuerdo cuando iba a la piscina para hacer ejercicio y tardaba más en ir en coche y aparcar que si optase por pasear hasta allí. Paradojas que demuestran insensatez.

Sin embargo, caminar al ir a trabajar ( u otras actividades dentro de ciudades de dimensión media o pequeña) es un placer y como tal no debemos prescindir de ello; al menos antes de que la edad, una silla de ruedas o la frontera de una residencia de ancianos nos impidan caminar.

Veamos las fuertes razones que nos ayudarán a recuperar el placer de caminar al ir al trabajo. Nunca se dio tanto por tan poco.

1. Mejora la salud. Suele decirse que el «Doctor piernas» es el mas eficaz: ejercicio, mejoría de corazón, menos colesterol, reduce la ansiedad, menos estress. etc.

2. La mente se activa y libera. El cerebro cuando se pasea se va fijando libremente en escaparates, peatones, incidencias varias, sin ir en «modo alerta» como cuando se conduce. Se descansa, y además, el variar las rutas abre horizontes mentales que relajan y avivan la imaginación.

3. La economía doméstica se beneficia. Sacar el coche hacia el trabajo lleva gastos generales (combustible, aceite, gastos de parking, etc) además del riesgo de accidentes. Se ahorra y mucho.

4. La salud del planeta mejora. No lo contaminamos.

5. También hay menos contaminación acústica ( motores, bocinas,etc).

6. El beneficio psicológico. Se produce al ser conscientes de que hacemos algo gratis mientras otros asumen gastos, y además podemos observarlos relajados desde la acera mientras adoptan gestos angustiados y tensos encerrados en sus vehículos.

7. Mientras se camina nos sentimos mas libres: somos dueños de nuestra ruta sin condicionantes de normas de tráfico ni de otros vehículos que nos interfieren.

8. La agradable sensación de contacto con el mundo por los poros: aire fresco, humedad, viento,etc. Sensación de vivir.

9. Y si hace sol…¡ toma vitamina D!

10. Y si llueve…¿hay mayor placer que sentirse seguro con un impermeable y paraguas frente a las inclemencias del tiempo?, ¿ y la satisfacción de alcanzar lugar seguro con éxito para guarecerse?, ¿ y oler ozono tras escampar?

11. Caminar mejora nuestra imagen: hábitos saludables se presumen de personas saludables.

12. Y mejoramos nuestra autoestima. No dependemos de vehículos y somos capaces de tener autonomía y disciplina para caminar a diario.

13. Caminar mejora la vida social. Te cruzas con personas, conversas, saludas y despides.

14. Caminar permite tener tiempo para reflexionar, sin prisas ni ruidos, ni televisiones. El yoga urbano.

15. Y se rentabiliza educativamente el tiempo pues si quieres aprender un idioma o seguir tus temas favoritos, basta con unos auriculares a tu smartphone y suscribirte a infinidad de podcast gratuitos desde internet, sobre cualquier cuestión imaginable.

16. Quien camina al trabajo calcula los tiempos con precisión y es puntual,  mientras con el coche es el azar, el tráfico o la lluvia quien puede determinar llegar pronto o tarde. ¿por qué arriesgarse?

17. Y si olvidas algo, te volteas por ello y aceleras el paso; si vas en coche, sueles cabrearte pero no vuelves.

¿quien da más por menos?. Caminar es tan importante como ir al gimnasio nos recuerdan los estudios científicos.  Si caminamos seremos mas humanos y es hora de cambiar de hábitos.