Trabajo

Sobrevivir a las preguntas ridículas y trampas de las entrevistas de trabajo

archivo_000-112Me entero por la revista Magazine de que el empresario tecnológico y millonario Elon Musk solía someter a los aspirantes finalistas a trabajar en su empresa SpaceX a un acertijo: Caminas una milla hacia el sur, una hacia el oeste y una hacia el norte. Acabas exactamente donde comenzaste. ¿Dónde estás?

Me quedo perplejo porque acierto la respuesta de inmediato y me pregunto como es posible que una entrevista de recursos humanos que marca el futuro de una persona (y de una empresa) quede al albur de un fugaz instante y una cuestión trivial.

Para desvanecer el suspense y por si alguno es sometido a tal pregunta en el futuro, anticipo que la respuesta al acertijo de Musk es doble. El Polo Norte y el Polo Sur, porque si se camina una milla al sur y después otra hacia el oeste y otra al norte se regresa al mismo punto geográfico, ya que en los polos convergen todos los meridianos. Basta con visualizarlo mentalmente e imaginarse caminando y se comprende la solución.

Lo que no comprendo es que utilidad tiene ese conocimiento salvo que Musk mande a sus trabajadores al Polo a dar paseos inútiles. Quizá yo respondería a la preguntita de marras (¿donde estoy?), diciendo que supongo que estoy en algún lugar sometido a revisión psiquiátrica porque estar en el Polo es preocupante, pero dar vueltas para regresar al mismo sitio es alarmante y no digamos con el frío que hace. Aunque pensándolo bien, la respuesta para obtener nota sería decir que no hay dos respuestas válidas, de cada Polo, ya que la única correcta sería en el Polo Sur, porque en el Polo Norte hay osos blancos y me temo que no terminaría el primer paseo.

Supongo que existirán otras pruebas complementarias por parte del magnate, eso me lleva a reflexionar sobre el papel de las entrevistas de selección para el trabajo y a contar alguna anécdota y consejo al respecto.

focos1. En mi experiencia contaré que allá en la década de los noventa solía formar parte de unas Comisiones de Selección para contratación temporal de trabajadores para una Universidad en que un puñado de los seleccionados por su trayectoria curricular y adecuación objetiva para la plaza, debía someterse a una entrevista de unos cinco minutos con esa Comisión (formada por vocales de variado pelaje y sin formación específica como entrevistadores) y además sin guión alguno sobre las preguntas.

Las cuatro pinceladas impresionistas de mi personal balance de esta singular experiencia como entrevistador son las siguientes.

– Decía más del entrevistado su manera de caminar, mirar a los miembros del tribunal, su presentación o cortesía al escuchar las preguntas, que sus respuestas.

– La carga de subjetividad al valorar a los aspirantes era inmensa, aunque ningún vocal de la Comisión lo confesase, pero quedaba clara en las deliberaciones ulteriores, donde en ocasiones lo anecdótico se elevaba a cruel comentario de fondo del estilo:

  • ¡Vaya tatuaje que lleva en el cuello!
  • ¿Visteis como nos tuteaba?.
  • ¡Y dice que para qué le preguntamos sobre la Universidad si sabemos más que él de ella!.
  • ¿No os acordáis que este ya fue contratado hace años y fue el que…?

– Frecuentemente, el vocal que hacía la pregunta intentaba lucirse más con ella ante sus compañeros, que conocer realmente la respuesta del aspirante.

– La empatía de cada vocal con la situación y planteamiento de cada aspirante era mínima. La investidura de la condición de miembro de la Comisión dotaba de un distanciamiento emocional y hacía perder de vista que el aspirante se jugaba el empleo y con ello el bienestar propio o necesidades de su familia.

temblor2. Recuerdo un caso real en que se trataba de reclutar ordenanzas para la administración universitaria y la pregunta que se me ocurrió formular a cada uno de los diez aspirantes finalistas era:

“Si está usted en un trastero de la Facultad, y el Decano le manda traslade al otro extremo del trastero varias pilas de boletines oficiales en papel, pero le insiste en que quiere que los pase de uno en uno, de ejemplar en ejemplar, y que regresará para comprobarlo dos horas después, ¿usted que haría si le parece que puede hacerse mejor y más rápida esa labor trasladando en bloque grupos de boletines?»

La mayoría de los aspirantes respondía que los pasarían de uno en uno, porque para eso mandaba el Decano y ellos estaban para obedecer (latía en ellos la humana idea de que se pretendía seleccionar trabajadores obedientes y no rebeldes ni que desafiasen a la autoridad).

Una minoría respondía que cuando estuviesen a solas los pasarían en bloque y así estaría el trabajo hecho en tiempo y no tenía que enterarse el Jefe del modo pues le importarían los resultados (en ellos contaba la perspectiva de la eficacia).

Lo curioso es que solo uno optó por el sentido común y ofreció la respuesta que a mí me parecía correcta: “Pues le sugeriría al Decano antes de empezar el trabajo que quizá podría hacerse de otra forma mas rápida y si le parecía bien”.

Y es que las entrevistas de trabajo son trampas para la razón y la auténtica personalidad. Estoy seguro que esos aspirantes si se pusiesen en el lugar de estar en sus hogares y su pareja les diese una orden similar extraña, directa y claramente le preguntarían la razón de tal criterio y le sugerirían hacerlo de otro modo. Sin embargo, cuando alguien es entrevistado se coloca en “modo complacencia” e intenta dar la respuesta que cree que el que plantea la pregunta quiere oír. Y entonces, falla.

preguntgas3. Por eso, mi recomendación cuando alguien me pide consejos para superar con éxito una entrevista selectiva suele moverse en tres simples frentes.

El primero es que se entere de quien forma parte del Tribunal o comisión y como es la empresa para la que es llamado (google ayuda mucho).

Lo segundo es que sea educado, hable suavemente y sin gritar y cuando reciba una pregunta de apariencia capciosa, conteste lo que le venga a la cabeza anteponiéndolo de algo del estilo “Quizá esté equivocado, pero…”, “No sé si he comprendido bien lo que se espera de mí, pero opino…”, “A riesgo de quedar en evidencia, diría que…”.

Y lo tercero, que se despida de la entrevista procurando mirar a los ojos de cada miembro del Tribunal, agradeciendo su tiempo.

examen4. Pero volviendo al acertijo en cuestión, me parece que decidir la vida de una persona en unos minutos es duro pero decidirlo sobre preguntas de lógica propias de almanaque, resulta frívolo. Primero, porque los acertijos y problemas de lógica se aprenden, como casi todo en la vida, con práctica y reiteración. Segundo, porque hay vida mas allá del ingenio, y hay cualidades valiosísimas como la generosidad, la tolerancia, el civismo, saber escuchar o la cortesía que “vuelan bajo radar” y son ajenas a la demostración de dominar montañas de datos o a las habilidades para resolver acertijos, sudokus o problema de ajedrez.

Por eso, permítaseme la ocurrencia de sugerir la mejor pregunta que un seleccionador debería hacer al aspirante a empleo:¿ Qué pregunta cree que este tribunal debería hacerle para que usted pudiese demostrarnos lo mucho que vale para el puesto?.

Una de las respuestas mas ingeniosas sería: “Esa misma pregunta”. (¿Lo pillan?)

Aunque yo preferiría algo mas impactante: “¿Por qué alguien tan capacitado como usted, tan dispuesto a sacrificarse por la empresa, no opta por otras empresas mejores que matarían por contarle entre sus filas?”. (¿A que esto lo pillan mejor?)despedido

NOTA.- Para divertirme he hecho esta pregunta a un amigo, rogándole se pusiese en situación de aspirante, y tras pedirme varias veces que le repitiese la pregunta, no voy a dejar constancia de su respuesta, pero me limité a decirle con una sonrisa: “Gracias, ya le llamaremos si acaso”.

¡ Buen día !

2 comentarios

  1. Pues siento contradecirte, pero la única respuesta posible, con osos y sin osos, es el Polo Norte, porque en el Polo Sur no se puede caminar una milla «al sur». Por lo demás muy buen artículo, como todos.

    Le gusta a 1 persona

Gracias por comentar con el fin de mejorar

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: